No guarda un gran recuerdo la afición del Espanyol de uno de los jugadores del Levante UD, conjunto al que se enfrentará esta quinta jornada de LaLiga Hypermotion 2023-24. Posiblemente, él tampoco le tenga mucho cariño al Espanyol, del que no dijo ni una palabra de cariño en sus declaraciones a los medios de su club. Dani Gómez, que la pasada campaña actuó en calidad de cedido por el club granota en el cuadro blanquiazul, carga la escopeta para firmar ‘la ley del ex’.
«Si queremos estar arriba, en este tipo de partidos tenemos que plantar cara a un muy buen equipo, a un equipo de los que a priori tiene que estar arriba y nosotros queremos estar ahí», declaró Dani Gómez sobre el encuentro ante el Espanyol en el Ciutat de València. Un partido, como los anteriores, en el que no se espera al ariete en la titularidad; tiene por delante a Mohamed Bouldini y Alejandro Cantero, la pareja atacante granota en las jornadas anteriores.
Dani Gómez, que se perdió gran parte de la pretemporada y la primera jornada liguera al recuperarse de una intervención de tobillo, acumula 37 minutos disputados en dos duelos; se quedó en el banquillo en la tercera fecha del campeonato. De momento va camino de superar los minutos ligueros que jugó como perico, 82, cifra que no llega ni al uno por ciento de los que se disputaron a lo largo de las 38 jornadas.
También es recordado Dani Gómez por autoexpulsarse en la primera ronda de la Copa del Rey, en la que el Espanyol se impuso por cero a dos al CD Rincón. El atacante desaprovechó su oportunidad y vio la roja directa en el minuto 43 por encararse con el colegiado; le cayeron cuatro partidos de sanción y desde entonces solo tuvo dos ratitos más.
Pero cuidado, porque Dani Gómez ya sabe lo que es marcarle al Espanyol. Lo logró en la campaña 2021-22 precisamente en el Ciutat de València, cuando un error de un Joan García que había sustituido a un lesionado Diego López permitió al delantero marcar prácticamente a puerta vacía. Supuso el empate a uno, marcador con el que concluiría el duelo.
Dani Gómez, uno de esos refuerzos incomprensibles del anterior director deporivo, Domingo Catoira, pasó con más pena que gloria por el Espanyol. Los blanquiazules prefieren recordarlo así que no por amargarles una tarde, algo que ya logró hace tres temporadas.