Diciembre termina y con él se cierra un 2023 más que decepcionante para el Espanyol. Un año en que ha fallado todo menos la AFICIÓN. Es la única que mantiene viva la entidad. El resto de los ‘componentes’ del club ha hecho aguas y, lo peor de todo, es que mientras el barco iba (y sigue yendo) a la deriva nadie toma el mando para ‘achicar’ el agua. Los responsables de las distintas áreas viven una realidad paralela. Parece que no son conscientes (y si lo son, no lo demuestran) lo mucho que está en juego. La puntuación no se pone al final de temporada.
No, Fran Garagarza. Con todos mis respetos director deportivo, si sirve la frase ‘partido a partido’ también sirve la autocrítica cada jornada. Sin autocrítica no se va a ninguna parte, como está demostrado, e impide ver los errores para rectificarlos. No se puede rectificar al final de campaña cuando ya no hay tiempo para reaccionar. Claro que la palabra ‘reacción’ no está en el diccionario de los dirigentes. ¡Ay! Sí, perdón. Reaccionaron en la jornada 14 destituyendo a Luis García para traer a ‘su’ entrenador. Se ve que el asturiano no lo era, por eso no le trajeron los fichajes que pidió y esperaron a ver si él se rendía. Pero Luis García es perico y no se rinde nunca.
Como ahora ya tienen a ‘su’ entrenador, es de esperar que sepan aprovechar bien el mercado invernal. Y no me refiero a vender para que Chen Yansheng siga recuperando lo que invirtió, que está en su derecho porque es el dueño del club. Me refiero a reforzar, y mucho, la plantilla. No es una “plantilla compensada” como dijeron Mao Ye y Garagarza en la Junta de Accionistas. Los resultados lo confirman. Enero es un mes clave para el presente y futuro del Espanyol. Sin fichajes será muy complicado el ascenso y tienen que llegar para aportar mucho, no para engrosar el número del vestuario. Hay que dar un giro de 180 grados a un equipo que ha perdido el ADN perico, que carece de empatía con la afición y que ya no es ‘respetado’ por los rivales. El Espanyol tiene que estar el año que viene en Primera división sí o sí. No hay más. Un único objetivo y poco se está haciendo para lograrlo. Fichar con cara y ojos es una de las formas de conseguir el ascenso. El resto es cosa del director deportivo, técnico y jugadores. Recuerden: el Espanyol es de Primera.