La final es una realidad. La Copa del Rey juvenil ha llegado a su ocaso y el Espanyol es, junto al RCD Mallorca, finalista. Los de Javi Chica buscarán culminar una competición del K.O. –junto a la ‘Final Four‘– por todo lo alto, levantando el trofeo al cielo de Oviedo. El Carlos Tartiere será el escenario de un enfrentamiento ajustado, competido y exigente entre los dos ‘cocos’ del grupo tercero de la División de Honor. El partido más importante de la temporada para los pericos ante un rival que conoce muy bien y que ya se ha medido en una ocasión.
El Juvenil A doblegó con carácter, solvencia y resistencia al anfitrión de la ‘Final Four’, el Real Oviedo. Las dianas de Lluc Castell, Sergio Rivarés, ambos en un primer tiempo efectivo por parte blanquiazul, y de Uri Pallas, en el tiempo de prolongación, contrarrestaron la única diana ovetense a pies de Marcos Lopes en el añadido. El duelo mostró el afán competitivo del equipo de Javi Chica, que impregna a todos los jugadores de intensidad y una gran mentalidad.
Con dos días de descanso y varios entrenamientos en la capital asturiana, el principal objetivo para el Espanyol es tener a todos los jugadores disponibles y en las mejores condiciones posibles. La carga de minutos es importante y dosificar las cargas se ha antojado primordial para el cuerpo técnico perico, además cuando se medirá ante un equipo muy bien preparado en este aspecto. En el capítulo de bajas, Javi Chica podrá disponer de todos sus mimbres sin excepción.
En cuanto al rival, un RCD Mallorca en alza, buscará ganar su primera Copa del Rey juvenil en la historia. Asimismo, para llegar a la final, los baleares han derrotado al Arucas, al Villarreal CF, al Deportivo de La Coruña –en penaltis– y al CF Badalona en semis. En el Carlos Tartiere, goleó al cuadro escapado por cinco goles a cero en un duelo en el que los bermellones fueron claramente superiores en todo momento, así como efectivos y determinantes en sus ocasiones en el área.
El RCD Mallorca, siempre que ha jugado una final, la ha perdido, como en la campaña 2002-03, cuando cayó derrotado ante el propio Espanyol, con un Javi Chica capitán del conjunto perico. En otro orden de las cosas, la hornada de jugadores del equipo bermellón es muy buena, tal y como se está viendo reflejado en liga, siendo líder del grupo, desplegando un magnífico juego.