El Espanyol está a seis partidos de lograr el ascenso a Primera división y si quiere conseguirlo no puede fallar. Una de las asignaturas pendientes de los de Manolo González es remontar los partidos. En 36 jornadas, los blanquiazules se han visto por detrás en el marcador en 14 partidos y les ha costado mucho sacar puntos en estas situaciones: solo han logrado tres victorias, cuatro empates y siete derrotas.
Ante el FC Andorra (1-1), el Espanyol volvió a vivir esta situación. En el minuto 29 de partido, el cuadro ‘Tricolor’ se puso por delante en el marcador y no fue hasta el 52′ cuando Martin Braithwaite salió al rescate para igualar el marcador. De nuevo, el conjunto perico volvió a ceder dos puntos en el Stage Front Stadium, como ya ocurrió ante la SD Huesca y el CD Tenerife. Y es que, si no hubiesen perdido tantos puntos en casa, los blanquiazules serían líderes con 65 puntos.
Las victorias con remontada llegaron en la jornada 4 ante la SD Amorebieta (3-2) y en la jornada 34 ante el Albacete Balompié (2-1) en el Stage Front Stadium y ante la SD Eibar, en la jornada 28, a domicilio (2-3). Los empates ante CD Eldense (3-3), SD Eibar (2-2), Burgos CF (3-3) y FC Andorra (1-1) se dieron todos en casa y en los encuentros en los que no se pudo puntuar fueron en la visita al Tenerife (1-0), Villarreal B (3-1), CD Leganés (0-1), en Cornellà, y ante el Sporting de Gijón (2-0), Real Oviedo (2-0), CD Eldense (3-2) y Racing de Santander (2-0).
En Segunda división es muy importante ser fuerte en casa. Sin embargo, esa virtud que tenía el Espanyol como local ha cambiado y la mejora se ve más a domicilio. Los blanquiazules tendrán por delante cuatro partidos en los que optaran al todo o al nada ante rivales directo: Elche CF (5º), Real Valladolid (3º), a domicilio, y Sporting de Gijón (6º) y Real Oviedo (7º), en el Stage Front Stadium.