Una nueva ayuda arbitral al Real Valladolid y otro robo al Espanyol. Ya era sospechoso que la RFEF hubiera elegido a un colegiado cántabro como Cordero Vega para arbitrar el partido, cuando el Real Racing Club es uno de los rivales directos del cuadro perico por el ascenso. Y no tardaron en hacerse realidad las sospechas.
Porque más allá de una primera falta señalada de Gastón Valles en la frontal del área tras parar con el pecho un balón y Anuar chocar por detrás con el charrúa, el colegiado del duelo pasó por alto que el portero del Real Valladolid, Jordi Masip, blocara el balón fuera del área, lo que hubiera supuesto falta y expulsión debido a que Braithwaite hubiera tenido posibilidad de alcanzar el cuero si no lo hubiese atrapado y, de este modo, hubiera supuesto una acción manifiesta de gol. Cordero Vega ni siquiera fue al VAR a ver una acción clarísima a favor del Espanyol.
Y eso que Martin Braithwaite reclamó de manera ostensible, puesto que o vio en primera persona: perseguía el cuero cuando Jordi Masip blocó el cuero. Hubo alguna duda en primera instancia, pero las imágenes de la televisión dejan claro que el portero del Real Valladolid cogió el cuero fuera del área. Otro robo más al Espanyol. Y en las dos últimas temporadas hemos perdido la cuenta.
Pero no solo quedó ahí, sino que poco después Jofre Carreras tuvo que ser sustituido por un pisotón de Anuar dentro del área tras el disparo del extremo. El tobillo del canterano del Espanyol quedó claramente dolorido, pero nuevamente Cordero Vega se hizo el sueco.
