El Espanyol necesita ganar al Real Oviedo para estar en Primera división. Y para eso debe marcar y acabar con su sequía goleadora de los dos últimos partidos. El 1-0 del Carlos Tartiere lo deja todo abierto para el partido de vuelta. En los 45 partidos de liga que el Espanyol ha disputado esta temporada -42 de Liga y 3 de ‘play-off’- nunca he estado tres partidos seguidos sin marcar. Lo máximo que ha estado sin ver puerta ha sido en dos encuentros.
En los 14 partidos que Luis García dirigió al Espanyol, en los que el equipo se quedó tres veces sin marcar, solo en una ocasión estuvo dos jornadas seguidas sin lograr un gol. Fue en la única derrota en el Stage Front Stadium, contra el Leganés, y en la visita a El Molinón. Tras ese partido se lograron dos goles en casa. Se perdieron los tres partidos en los que no se vio puerta.
Durante los 16 partidos que dirigió Luis Miguel Ramis, el equipo nunca encadenó dos partidos sin marcar. Se quedó cuatro jornadas sin marcar en las que solo sumó dos puntos.
En la etapa Manolo González, el Espanyol ha crecido mucho en defensa, pero ha perdido potencial ofensivo. En los 15 partidos -12 de Liga y 3 de ‘play-off’- que lleva el técnico lucense al frente del equipo, el Espanyol se ha quedado siete veces sin marcar, dos de ellas en casa, ambas contra el Sporting de Gijón. En estos partidos, en dos ocasiones, ha estado dos veces sin marcar en dos partidos seguidos.
La anterior ocasión que el Espanyol estuvo dos partidos sin ver puerta, se rompió con dos goles y fue en el partido contra el Real Oviedo.