Pol Lozano (Sant Quirze del Vallès, 6/10/1999) se está consolidando esta temporada en el once titular del Espanyol. El canterano suma once partidos de liga, nueve como titular, y solo las lesiones le han apartado de los planes de Manolo. Reconoce que está atravesando por su mejor momento desde que llegó al primer equipo espanyolista. Para lograrlo ha tenido que picar mucha piedra. Tras ser un jugador importante durante toda su etapa en la cantera, Pol se lo tuvo que currar con varias cesiones para poder disfrutar del sueño de su vida. Perico de cuna deja claro que le encantaría llevar el ‘21’, que ser el capitán del Espanyol es lo más grande que le puede pasar y que ante la situación que atraviesa el club, necesitan a la afición más que nunca. Pol Lozano ha explicado a ‘El 1900’ como escogió el dorsal ‘10’ y que Vicente Moreno le dejó un gran recuerdo.
-¿Qué le está pasando al Espanyol que no acaba de funcionar?
Principalmente, que estamos teniendo un gran problema a domicilio donde solo hemos sacado un punto en ocho partidos. En casa hemos ganado cuatro partidos de siete, que son buenos números para seguir en Primera división, pero fuera estamos fallando. En algunos partidos, como el último en Getafe, nos hemos ido con la sensación de que podíamos haber hecho más.
-Todos éramos conscientes de que estábamos ante una temporada complicada, pero ¿te esperabas que costara tanto?
No he tenido ningún año fácil desde que estoy en el primer equipo del Espanyol. La temporada que subí, ya fue muy complicada porque la empezamos jugando la Europa League y la acabamos descendiendo. Aquí he sufrido cada año. En los dos años que he jugado con el Espanyol en Segunda solo nos valía subir con la presión que eso conlleva. Y en los dos que bajamos todo fue muy difícil. Yo sí que me esperaba que este año sería complicado.
-¿La salvación pasa por los partidos en casa?
Sí. Llevar a estas alturas cuatro victorias en casa son números para salvarse bien, pero hemos de mejorar fuera para hacerlos mejores. Recibimos a Osasuna y Valencia, dos partidos en los que hemos de intentar lograr los tres puntos, para después ir al campo de Las Palmas, donde nos enfrentaremos a Diego Martínez que será un aliciente para intentar ganarles.
-Diego Martínez, Vicente Moreno, Manolo, Ramis, Luis García convivieron y conviven con el ‘run run’ por un cese. ¿Cómo lleva un futbolista estos continuos rumores?
No sé cuántos entrenadores han pasado por el Espanyol desde que debuté con el primer equipo. Cuando las cosas van mal y los resultados no llegan, el primero que cae es el entrenador, y no siempre es justo. Siempre ha sido así en el fútbol. Yo estoy muy a favor de Manolo, ya que creo que nos está exprimiendo y sacando un buen rendimiento. Considero que si no fuera por él no tendríamos estos números en casa. Por todo lo que nos está aportando para mí es de los mejores entrenadores que podemos tener en estos momentos.
-Con Manolo lograste un ascenso al igual que con Vicente Moreno. ¿Qué recuerdo tienes del técnico de Massanassa?
Profesionalmente me parece un entrenador de los mejores que han pasado por aquí. No te diría el mejor que he tenido, pero sí que, si un día decido ser entrenador, muchas cosas las cogería de él. Es un técnico muy sacrificado que le da mucha importancia a los pequeños detalles.
-¿Los continuos cambios de entrenador complican la integración de los más jóvenes?
Totalmente. En los últimos tiempos han pasado varios directores deportivos y cada uno ha hecho su trabajo, ya sea bien o mal. Yo creo mucho en que hay que dejar trabajar a las personas. No ser tan autodestructivo y cambiar las cosas tan rápido. En este club hemos tenido directores deportivos con muy poca paciencia con los entrenadores. Este año se está manteniendo a Manolo, que me parece correcto, y considero que el año pasado, quizás, nos precipitamos en algunas decisiones, ya que la forma de jugar de Luis García no era la misma que con Ramis. Hicimos un equipo para jugar de una manera y después se cambió el estilo.
-En el Espanyol tenemos un dorsal muy especial, el ‘21’, y otro con mucha historia como es el ‘23’ que llevó Tamudo, pero en el fútbol el ‘10’ es mucho ‘10’. ¿Llevar este dorsal tiene una presión añadida?
(Risas) Demasiada. Yo casi ni lo quería. Cuando Darder tenía casi cerrada su salida del Espanyol me escribió y me dijo ‘ya puedes coger el ‘10’. No sé si en broma, ya que yo nunca había insistido en este dorsal. Toda mi vida he llevado el ‘6’. Nunca he utilizado el ‘10’. Se dio esa situación y lo hablé con Luis García, ya que estaban libres el ‘10’ y el ‘21’ de Nico. Comentamos intercambiarlos, pero al final no se pudo y me quedé con el ‘10’ casi de una manera anecdótica. Cuando hago un mal partido, no tardan en decir vaya partido del ‘10’ o cosas así. Yo sé que pesa este número, pero lo que tengo que hacer es demostrar que merezco jugar en el Espanyol. A veces pienso que con el ‘6’ estaría más tranquilo, pero es lo que hay y a mí me gusta la presión.
-El ’21’ también tiene mucho peso. ¿Te gustaría llevarlo?
Me encantaría. Es un número que respeto muchísimo. Compartía representante con Dani.
*El resto de la entrevista la podrás leer en nuestra edición de papel de este sábado 14 de diciembre.