Los mercados de invierno suelen servir, normalmente, para corregir los errores cometidos durante la ventana para fichar en verano, aunque en algunas ocasiones han servido para intentar dar un paso adelante en busca de un objetivo más ambicioso. Pero acertar en enero no es sencillo. Normalmente el jugador que llega no está teniendo protagonismo en sus equipos y busca una salida para demostrar su fútbol.
En el Espanyol habitualmente una de las prioridades durante los meses de enero ha sido reforzar su delantera. Y en el Espanyol las hemos visto de todos los colores. La cara más positiva es la de Pablo Daniel Osvaldo, quien llegó al club en enero de 2010 cedido por Bolonia, con una opción de compra de 5 millones que el Espanyol ejecutó a final de temporada. Otro e los grandes aciertos fue el fichaje de Raúl de Tomás, por quien se pagaron 22 millones al Benfica. El delantero madrileño no pudo evitar salvar al equipo, pero fue el máximo goleador del Espanyol durante las dos campañas completas que jugó en el RCDE Stadium. Walter Pandiani o Iván Alonso son otros de los que dejaron buenas sensaciones,
Después nos encontramos a futbolistas que llegaron siendo unos desconocidos y que cumplieron su misión. Wu Lei cerró el marcador en el partido que nos dio la clasificación para Europa, mientras que Raducanu y Dimata, tras marcar goles importantes para la salvación y ascenso a Primera, fueron desapareciendo, salieron cedidos antes de poner punto y final a su etapa en el Espanyol.
Facundo Ferreyra, que llegó el mismo mes que Wu Lei, nunca demostró nada y se marchó dejando unos de los peores registros que han firmado los delanteros del Espanyol en los últimos tiempos.
5 comentarios
Si no arreglamos el juego y logramos que lleguen más balones arriba, da igual qué delantero juegue.
Necesitamos un delantero que en la frontal se busque la vida y chute a puerta, poco más. Lloro de ver el remate de Antoniu Roca con el caramelo que le puso Brian, o con lo que falló Puado contra el Valencia…en esos detalles que un killer te enchufa está la salvación
Pero esos jugadores que apenas fallan y que meten casi todo, seguramente cuestan varias decenas de millones.
Lo ideal es buscar chavales de filiales de equipos muy TOP que todavía no tienen sitio en el primer equipo pero que apuntan maneras. El ejemplo claro es Samu Omorodion, se lo cedió el Atlético el año pasado al Alavés. Este año les ha cedido a Carlos Martín, muy bueno también. Esos chavales buscan puerta con facilidad.
De ese estilo se supone que es Veliz. Mucho riesgo. Te puede salir bien, pero también mal. Y encima si sale bien, el beneficio mayor es para otros. No lo veo. Creo que el camino a seguir ha de ser otro.