La lateral derecho del RCD Espanyol, Daniela Caracas, y Colombia -Grupo H– no han podido jugar su partido ante la República de Irlanda -Grupo B- en Brisbane. Ambas selecciones se iban a enfrentar este viernes, a las 12 hora española, en un amistoso para preparar el Mundial de Australia y Nueva Zelanda y en el minuto 23 el partido se ha suspendido por decisión de las irlandesas.
El partido se disputó a puerta cerrada y sin la presencia de los medios de comunicación. Durante los 23 minutos transcurridos dos jugadoras de Colombia vieron tarjeta amarilla y una vez confirmado que no se iba a reanudar el juego las futbolistas irlandesas empezaron a calentar y a hacer algún ejercicio más físico, mientras que las colombianas se retiraron a vestuarios.
Desde la Federación Irlandesa de Fútbol, la primera en pronunciarse, han comunicado que decidieron no seguir jugando porque “el partido se volvió demasiado físico”. Esta decisión fue consultada con la jueza central que decidió suspender el partido. Además, la centrocampista irlandesa, Denise O’Sullivan, fue trasladada al hospital al sufrir una lesión en la espinilla tras una dura entrada.
Más tarde, la Federación de Fútbol de Colombia emitió un comunicado en el que ha aclarado que «el amistoso que debía jugarse ante Irlanda fue suspendido por las rivales porque prefirieron no continuar jugando cuando ya se habían jugado 23 minutos en la primera parte». Una vez conocida la noticia, la Tricolor «regresará a Sydney para seguir con su preparación antes del debut en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda».
Antes de su debut en el Mundial, a Colombia le queda un amistoso. El lunes 17 de julio la lateral perica, Daniela Caracas, y la exespanyolista, Manuela Vanegas, disputarán a puerta cerrada un partido de entrenamiento ante China -grupo D- (04:00 horas de la madrugada en España). Ocho días después, la Tricolor jugará su primer partido de la Copa del Mundo el martes 25 de julio ante Corea del Sur.