Sergi Darder reconoció hace tiempo que toco fondo, que todo le afectaba demasiado y que un psicólogo y un ‘coach’ le ayudaron a ser más fuerte. El capitán del Espanyol, en distintas entrevistas, apuntó que “tenía un problema mental desde hace tiempo. Todo me afectaba mucho y me dejaba llevar por la corriente cuando las cosas iban bien o mal. A la mínima que fallaba me hundía”.
El ‘capitán ’10’ del Espanyol consideraba que la ayuda de un psicólogo en el deporte se tenía que normalizar. “Los futbolistas somos personas, también. Yo era reticente a reconocer el problema, pero después he visto que ir al psicólogo es bueno para mucha gente. No solo para aquellas personas que necesitan ingresar en un hospital, sino también para cualquiera que tenga un problema”, se sinceró con esta declaración al diario Ara. Y la realidad es que cada vez hay más jugadores que apuestan por este tipo de ayuda.
Sin ir más lejos, en una interesante entrevista de los compañeros de As a Óscar Gil, el ilicitano ha reconocido lleva tiempo recurriendo a asistencia psicológica. “Desde que estoy en el fútbol profesional recurro a ella. Creo que es necesaria, sobre todo para el desahogo. Los deportistas estamos expuestos y debemos gestionar los elogios, ponerte un colchón si va todo bien, y también no creerte el peor cuando todo va mal. En temporadas como la pasada, va muy bien tener el apoyo de un profesional. La mayoría del equipo lo tiene”.
Óscar Gil también ha tenido el apoyo de Luis García, el técnico lo definió como una “maquina mental” y “ejemplo para seguir”. “Lógicamente fue un apoyo para seguir trabajando, confiando en lo que estás haciendo y mejorando, que era la idea. Siempre te intentas apoyar en gente cercana, como el míster, el cuerpo técnico, gente del club con la que me gusta hablar mucho. Esas son las opiniones que debo valorar, tanto si son positivas para reforzar como si te dicen que no les gusta lo que estás haciendo”, ha manifestado. Y ha añadido que “hoy en día es muy fácil decir cosas, y está claro que a todos nos afectan los comentarios negativos, seas futbolista o no, pero al final aprendes a darle valor a lo que realmente debe ser importarte. Más que para comerme la cabeza, esas opiniones deben servirme para trabajar en que sean positivas”.
