Los 18.122 aficionados que presenciaron el partido entre el Espanyol y el Valencia CF no solo tuvieron que aguantar las bajas temperaturas que estamos teniendo estos días, sino que lo peor fue el soportar la segunda parte del Espanyol, en la que el equipo desapareció. Pese a la hora del partido y la proximidad de las fiestas navideñas, que siempre dificultan acudir a partidos en estas fechas, algo más de 18.000 pericos no faltaron a su cita. Ya durante la semana se intuyó que no habría una gran entrada pese a lo mucho que había en juego. Pero si al equipo se le pueden reprochar muchas cosas, ya que no puede cambiar tanto de una parte a otra, a la afición no se le puede recriminar nada. Es muy consciente de lo que hay en juego y siempre que puede está. No hay que llamarla.
Los dos últimos partidos en casa han sido toda una decepción tras volver a sonreír con la victoria contra el Real Celta de Vigo. Dos puntos ante CA Osasuna y Valencia CF son un pobre botín que nos ha impedido salir de los puestos de descenso. Con ellos vuelve el pesimismo en el entorno. Se reabre el debate sobre la urgencia de reforzar la plantilla en el mercado de invierno y vuelve los rumores de una venta que, según me llega, podría estar cerca, aunque no sería la opción de Martin Braithwaite.
La realidad del Espanyol es cruda y esta dice que hay pocos motivos en los que creer. Unos se agarran a Manolo González, mientras que otros no entienden tantos elogios hacia el técnico y consideran que su etapa en el primer equipo del Espanyol está acabada. Yo me pregunto. ¿Hay algo a lo que nos podamos agarrar los pericos? ¿Alguna alegría? Y rápidamente me viene algo que me llamo mucho la atención de las palabras de Chen Yansheng en la última Junta de Accionistas. “En el ámbito social no puedo más que sentirme orgulloso de la enorme masa social de seguidores del Espanyol y darles las gracias por el apoyo demostrado.
Estamos en unos números de presencia en los partidos que recuperan la mejor etapa de la historia del club”, dijo el presidente del Espanyol. Para acabar dando una cifra muy positiva: “Concluimos el pasado mes de noviembre habiendo superado los 33.000 socios, de los cuales 28.000 son abonados”. La afición responde y con su apoyo la salvación será más fácil. Ahora falta que los horarios acompañen porque en las tres jornadas que hemos jugado de local entre semana, solo hemos sumado un punto. El de ayer ante el Valencia CF.
2 comentarios
Sí que hay algo que reprochar a la afición, que silbe en vez de animar. Ayer silbamos por lo menos los últimos 25 minutos al equipo. Es comprensible el enfado y la tristeza, pero eso no justifica la acción. Porque es poco inteligente, ya que no solamente no ayuda al equipo, sino que le perjudica muchísimo.
Portem més de 15 anys fent pena, i no podem xiular? L’altre opció es renunciar al abonament i no passar més vergonya.