Alejo Veliz (Gödeken, Argentina, 19 de septiembre de 2003) fue el gran protagonista del triunfo del Espanyol ante el Rayo Vallecano (2-1). El delantero argentino marcó el gol de la victoria en el minuto 96 y tras el pitido final reconoció que “tenía una espina clavada, ya que buscaba el gol y no lo conseguía”. Con su tanto desató la locura en el RCDE Stadium y, posiblemente, ese momento de éxtasis le hizo olvidarse de bailar sobre el césped, como suele hacer tras perforar la portería rival. Y es que el baile siempre ha estado muy presente en la vida de Veliz.
Amante del malambo, baile folclórico argentino, Veliz compartía el tipo de bailarín con el de futbolista, pero su madre le hizo elegir entre ambas aficiones, ya que exigían un gasto que su familia no podía costear. Descartó el baile, pero no ha olvidado esa faceta. Muchos de sus goles los celebra bailando. “En mi casa gusta mucho el folclore y empecé a bailar a los tres años hasta los 15. Era el fútbol y el folclore hasta que me decidí por el fútbol. Era una disciplina que se llama malambo, de zapateo. Fui a Cosquín, que es de los mayores escenarios de Argentina, en representación de Santa Fe y pude quedar primero”, explicaba.
*En nuestra edición de este sábado 7 de septiembre te explicamos su etapa de bailarín, en la que ganó un concurso, cómo y cuándo empezó a jugar al fútbol profesional y porqué le apodan el conejo