El Espanyol – FC Barcelona podría traer consecuencias y en el plano deportivo. Durante los minutos finales del partido ante el Real Betis se lanzaron tres mecheros, lo que obligó a parar el partido, siendo el motivo por el que peligra el derbi del próximo jueves 15 de mayo (21.30 horas) en el RCDE Stadium de poder jugarse a puerta cerrada. Además, el acta del partido recoge algunos incidentes por el colegiado Guillermo Cuadra Fernández.
Todo ocurrió en el minuto 92 con el gol de Antony dos Santos que supuso el 1-2 para el Real Betis. El guardameta visitante, Adrián San Miguel, avisó al árbitro de lanzamiento de objetos. Se pensaba que era un mechero, pero acabaron siendo tres que fueron recogidos por Cuadra Fernández que acto seguido fue a informar a los capitanes de ambos equipos, a un Mosso d’Escuadra, un miembro de seguridad y los entrenadores, Manolo González y Manuel Pellegrini.
Como es habitual en estos casos, en el RCDE Stadium se activó el protocolo y por megafonía ya dieron el aviso. El partido pudo terminarse después de unos minutos de pausa, sin embargo el Espanyol podría ser sancionado. En el acta del partido Cuadra Fernández, en el apartado de público redactó que «en el minuto 90+2 y tras la consecución de un gol por parte del equipo visitante, fueron arrojados tres mecheros desde la portería ubicada a la izquierda del terreno de juego, según se sale desde vestuarios, sin llegar a impactar en ningún participante”.
También añadió el colegiado que «el lanzamiento se produjo desde la grada ubicada detrás de la portería que ocupaba el portero visitante, donde se encontraban aficionados del equipo local, identificados por la indumentaria, emblemas y cánticos en favor de su equipo a lo largo del encuentro. Una vez se recogieron los mecheros, se inició el protocolo de lanzamientos”. Y, “una vez realizada la comunicación por megafonía, se pudo reanudar el encuentro, sin ocasionarse más incidentes hasta el final del partido».
Anteriores precedentes
Una situación similar que ha vivido el RCDE Stadium fue el pasado 26 de septiembre ante el Villarreal CF. El colegiado del partido, Quintero González, al dirigirse al túnel de vestuarios una vez finalizado el recibió el impacto del lanzamiento de un vaso desde la grada. El espectador fue localizado y el castigo para el Espanyol fue una multa de 3.000 euros. Ahora bien, el último Espanyol – FC Barcelona si que trajo consecuencias mayores. La invasión de campo fue sancionada finalmente con un partido, ante el Racing de Santander, pero en un principio iban a ser dos.
2 comentarios
He leído por ahí que el porterito del Betis se mofó de nuestros recogepelotas cuando el Betis marcó el segundo. ¿Se sabe si es cierto?
Esta es una más de las gracias de miembros de la Grada Canito. Y mientras tanto el respoinsable de l’Area social, mirandolos con simpatia. Que gracia tener que jugar con el campo cerrado!!