Gori Gracia está de vuelta. El canterano del RCD Espanyol una vez recuperado de sus dos lesiones de gravedad está entrando poco a poco en la dinámica del primer equipo y está teniendo minutos. “Estoy súper feliz”, ha manifestado el mediocentro, que casi dos años después ha vuelto a vestir la camiseta blanquiazul.
A sus 21 años, Gori Gracia ha pasado por dos lesiones muy duras en el ligamento cruzado de la rodilla izquierda. Tuvo minutos en el partido de entrenamiento antes de viajar a Marbella y jugó 45 minutos ante el Cádiz (0-1). “Ha sido muy duro, sobre todo mentalmente, pero el trabajo del día a día me ha hecho estar fuerte y la espera ha valido la pena”, ha destacado.
Desde el pasado 17 de octubre de 2021, el mediocentro no jugaba un partido con el Espanyol y ha reconocido que “es mucho tiempo sin jugar y ponerte la ropa se hace raro, al igual que volver a pisar el terreno de juego, estar con los compañeros e incluso tener a los rivales enfrente”. Además, ha hecho hincapié en que vivió “una sensación súper bonita porque al final es para lo que vivo: jugar al fútbol qué es lo que me hace feliz”.
El trabajo psicológico ha sido muy importante para Gori Gracia, algo que sigue trabajando a día de hoy: “Estoy trabajando mi mente, que al final eso se refleja en el campo”. Ante el Cádiz del experico Sergio González, el mediocentro dejó muy buena imagen sobre el césped y espera “ir de menos a más para encontrar mis sensaciones, mi mejor versión y así poder llegar a mi máximo nivel para competir con el equipo al máximo por todo”.
En Segunda división, el canterano apunta a ser un jugador importante en su vuelta a los terrenos de juego. Uno de los deseos de Gori Gracia para esta temporada es “intentar estar lo más arriba posible para volver a donde nos toca que es a Primera división porque el Espanyol se lo merece”.