José Gragera ha sido intervenido satisfactoriamente este martes de una lesión en el primer dedo del pie izquierdo conocida como Hallux rigidus, que consiste en la limitación del movimiento (rigidez) y en el desarrollo de artrosis de la articulación metatarsofalángica (pérdida del cartílago entre el primer metatarsiano y la falange del dedo gordo).
El centrocampista asturiano arrastra esta lesión desde la temporada pasada y en los últimos partidos, antes de tener que parar en Bilbao, los jugó infiltrados. Dependiendo de la evolución de su recuperación, José Gragera podría estar unos tres meses alejado de los terrenos de juego.
El propio José Gragera, tras su operación, ha publicado en su cuenta de Instagram un especial agradecimiento a los doctores que le operaron en un mensaje en el que desvela que llevaba más de un año con dolores en la zona. «Muchas gracias a todo el equipo de @institutcugat y en especial a David Barastegui. Ha sido una decisión difícil, muy difícil y consensuada, para acabar con un problema que arrastro desde hace más de un año. Gracias también a mi familia por entenderme y apoyarme en todo momento. Cuento los días para volver a disfrutar haciendo lo que más me gusta, mientras tanto apoyando y sumando desde fuera. Nos vemos pronto @rcdespanyol«, reza la totalidad del mensaje.