Tiene harto complicado el Espanyol reforzar el equipo en el mercado invernal, con lo que se tendrá que conformar con la vuelta de un Edu Expósito que ya tuvo sus primeros minutos en Las Palmas tras su lesión. Hay muchas esperanzas puestas en el centrocampista ofensivo, el regalo de Navidad para Manolo González. El técnico blanquiazul no solo recibirá como presente al de Cubelles; tendrá otra novedad más, pero habrá que esperar hasta marzo. Se trata de José Gragera.
El pivote defensivo asturiano fue operado a finales de noviembre de una lesión denominada Halluix rigidus en el primer dedo de su pie izquierdo. Desde entonces, José Gragera trabaja en el gimnasio en una recuperación lenta; un mes después todavía va con muletas. Si los plazos se cumplen, estará disponible en el mes de marzo. Se perderá seguras las próximas siete jornadas y podría reaparecer ante Villarreal CF en La Cerámica el fin de semana del 2-3 de marzo.
Mientras, Pol Lozano, Justin Smith y Rafa Bauza son los que cubrirán la ausencia de José Gragera. El primero, pieza clave para Manolo González, es el escogido para formar doble pivote con Alex Kral cuando el míster decide jugar con dos mediocentros, mientras que cuando se actúa con trivote los dos canteranos se disputan el puesto restante. De todos modos, la recuperación de Edu Expósito puede cambiar las ecuaciones y el Espanyol pasar a actuar con mediapunta, posición que estaría destinada al de Cubelles.