Ha tenido que esperar 12 convocatorias con el primer equipo José Luis Català para estrenarse de manera oficial con el Espanyol. El capitán del filial formó pareja de centrales con Sergi Gómez en el encuentro de la primera eliminatoria de la Copa del Rey contra el San Tirso SD y muchos aficionados vieron, al fin, cumplido el deseo de ver al defensor mallorquín con el primer equipo. Un sueño cumplido que dejó al central «muy feliz. Es un sueño y más viniendo de ‘La21′».
Català, que jugó 57 minutos, tan solo había ido citado con el primer equipo esta campaña en una ocasión, al partido frente al Atlético de Madrid. Pero, como le había sucedido en las diez ocasiones anteriores, se quedó todo el duelo en el banquillo. Anteriormente estuvo cerca de realizar su debut, en la segunda ronda de la Copa del Rey del pasado curso ante el Real Valladolid; el central saltó a hacer ejercicios de calentamiento e incluso recibió instrucciones de por aquel entonces entrenador del Espanyol, Luis Miguel Ramis, pero finalmente no tuvo la oportunidad.
En su segunda campaña como jugador del Espanyol B, Català suma nueve duelos y un gol con el filial, 44 y dos en total. Debutó con el primer equipo en el primer amistoso de la actual pretemporada ante el Girona FC, pero nada tuvo que ver con el duelo ante el San Tirso SD, de carácter oficial. Con tan solo 20 años, el de Palma de Mallorca vivió su momento más álgido en una corta carrera que ya ha tenido sus baches.
Porque en la campaña 2021-22, solo un año después de llegar al Juvenil B del Espanyol procedente del Ciudad de Mallorca, José Luis Català salió cedido al CE Sabadell. No tenía muchas esperanzas en regresar a la disciplina perica, pero un gran curso como arlequinado le abrió las puertas y tener un sitio en la plantilla del Juvenil A. El pasado curso, a pesar de ser su primero como jugador del filial, se hizo con un sitio en el eje de la zaga e incluso amplió su contrato hasta 2027. En Riazor dio un paso más en su crecimiento como futbolista.
