Keidi Bare fue una de las novedades que presentó Luis Miguel Ramis en el once titular ante el Mirandés respecto al que utilizó en Santander. El albanés, que recibió la camiseta conmemorativa de los 100 partidos oficiales que cumplió la semana pasada contra el Racing de Santander, cuajó un gran partido en su regreso a la titularidad tras seis jornadas sin ser de la partida. De hecho, el ‘8’ perico no jugaba de inicio desde el encuentro en el Stage Front Stadium ante el Burgos, el último que se disputó en 2023. Fue el 19 de diciembre. Es decir, hacia casi dos meses que Keidi no salía de inicio en el Espanyol de Ramis.
En esta ocasión, supo aprovechar las molestias que había arrastrado durante la semana Pol Lozano. El canterano se ha hecho dueño de la posición de pivote en el once del técnico tarraconense y deja poco margen de protagonismo a otros jugadores. El recambio natural del ‘10’ del Espanyol es el asturiano José Gragera, pero el sábado Ramis decidió apostar por Bare, que esta temporada todavía no había salido de inicio ocupando esa posición de ‘6’ –lo había hecho siempre como el acompañante más liberado en la medular–.
El partido del albanés le sirve para reivindicarse en una temporada en la que acaba contrato con el Espanyol. Este curso lleva disputados 20 partidos de Liga y tres de Copa, pero solo ha sido titular en 11. Eso sí, siempre que ha entrado en una convocatoria esta temporada ha acabado saltando al campo, aunque sea como suplente.
Antes del partido, el consejero Rafa Marañón le entregó la camiseta con la que se le felicitaba por haber alcanzado los 100 partidos con el Espanyol.
