José Cobos y la importancia que puede tener un único gol. Así titulé mi columna de la edición de papel de ‘El 1900’ del pasado sábado. Y este titular viene porque el jueves tuve la suerte de asistir a la presentación del cuaderno conmemorativo: ‘Sarrià: la bombonera de l’Espanyol (1923-1997)’ escrito por Oriol Pagès, la primera edición de Els Quaderns de la Fundació. A los pericos que disfrutamos en Sarrià siempre nos gusta recordar esa época.
Entre los exjugadores que estuvieron en el acto, hay cuatro que hicieron historia en el Espanyol por lo que lograron en Sarrià. Marañón fue el máximo goleador del estadio con 90 goles; N’Kono, el portero que más partidos jugó allí; Jordi Lardín, el último capitán de Sarrià y José Cobos, el autor del último tanto perico. En este artículo solo me voy a centrar en el futbolista francés. Hace un año tuve la suerte de entrevistarle y me sorprendió muy positivamente como en solo 18 meses se enganchó tanto al club. El francés se sintió cómodo en el acto. Contó anécdotas y dejó una frase muy importante: “Ha sido importante entrar en la historia con un solo gol, cuando alguno aquí ha marcado 90”, dijo en referencia a los goles de Marañón. Y eso tendría que llegar al vestuario perico. Todos suman. Y los goles más.
Con un Martin Braithwaite en racha goleadora, en mi escrito pedía que más jugadores debían aportar en esa faceta. Y apuntaba que cualquiera podría marcar el gol del ascenso, con el que entraría en la historia del club, y para ello era muy importante ganar al Eibar para regresar a los puestos de ascenso directo. Y dos jugadores se sumaron a esa petición. Y ninguno de los dos estaba entre los que los pericos podíamos esperar que marcaran.
El danés siguió agrandando sus registros y con el gol de penalti nos dio esperanza. Pero fueron dos jugadores con muy poco protagonismo los que hicieron posible la remontada. Los goles de Salvi y, sobre todo, el de Lazo hacen que gran parte del espanyolismo vuelva a creer. Salvi ya logró el tanto del empate ante el Amorebieta, en el otro partido de este curso que también se acabó remontando, mientras que Lazo se estrenó en este campeonato. El futbolista de campo con menos minutos en esta liga marcó un tanto que puede valer una gran parte del ascenso. Sin su gol, el ascenso directo estaría a dos puntos, mientras que, si Salvi no hubiera empatado el partido y hubiéramos perdido, la segunda plaza se hubiera quedado a cinco puntos más el goal-average.
Al igual que Cobos siempre será recordado por marcar el último gol de Sarrià, el de Lazo también tendrá un lugar en nuestra historia siempre que logremos el ascenso.