El decimoctavo entrenador en las 22 campañas de historia del Espanyol B como tal será Manolo González, un trotamundos del fútbol catalán que ha dejado huella por ahí por donde ha pasado. En un club acostumbrado a promocionar entrenadores, llama la atención que el escogido sea alguien externo al club y sin vinculación alguna a la entidad.
Ello es algo que solo había ocurrido en cuatro ocasiones anteriormente: con Rubi, Raúl Longhi, Manolo Márquez y José Aurelio Gay, aunque tan solo Márquez no tenía pasado blanquiazul como jugador. Los demás vistieron la camiseta perica, siendo Rubi el único en no tener minutos con el primer equipo.
Así pues, el ya exentrenador de la UD Almería, que jugó en el Espanyol B en el curso 1994-95, llegó al banquillo del filial en la campaña 2004-05 y estuvo ahí casi tres cursos; Longhi, que militó en el primer equipo perico en la época de los 70, llegó en la 2011-12 y fue entrenador del equipo temporada y media retomando su carrera en los banquillos; Manolo Márquez, sin pasado perico, aterrizó en el Espanyol B en la 2012-13 seis meses después de salir del Badalona CF; y José Aurelio Gay, futbolista del primer equipo a finales de los 80 y principios de los 90, fue entrenador del filial campaña y media, desde el inicio de la 2019-20.
Esta vez, el ADN espanyolista se ha dejado de lado para apostar por un entrenador que, pese a no haber dirigido a ningún filial, sabe perfectamente tratar con los jóvenes, puesto que dio sus primeros pasos como preparador en el fútbol base del Sant Gabriel y dirigió durante tres campañas al juvenil de Liga Nacional del Badalona CF. Con Manolo González, el Espanyol B buscará el tan ansiado ascenso. A la tercera debe ir a la vencida tras dos ‘play-off’ consecutivos.