Hoy hace exactamente 30 días del ascenso del Espanyol a la máxima categoría del fútbol español, tras remontar el uno a cero de la ida al Real Oviedo. Antes del descanso, Javi Puado se vistió de héroe con un doblete en apenas dos minutos para alzar al cuadro perico a LaLiga EA Sports. Un mes más tarde, se recuerda aquel 23 de julio como uno de los mejores momentos de la historia reciente del Espanyol en un RCDE Stadium que vivió una apasionante tarde.
No lo tuvo fácil el cuadro de Manolo González para igualar y dar la vuelta a la eliminatoria de la final del ‘play-off’ de ascenso de Primera división, pero lo logró gracias al buen hacer del equipo y al capitán Puado, con dos goles que entraron directamente en los anales de la historia del club. Y, a continuación, tras las dos dianas del canterano, el Espanyol realizó una obra de resistencia y un gran esfuerzo para llevarse el gato al agua y lograr el objetivo.
Ante 33.107 espectadores, el equipo de Manolo González jugó en volandas gracias al buen ambiente que vivió el RCDE Stadium durante aquella jornada que inició una hora y media antes con el recibimiento al autocar de los jugadores blanquiazules. Más de treinta mil aficionados asistieron a la vuelta a la máxima categoría y con posterior invasión de campo para después celebrar la promoción con los artífices, los jugadores.
Nuevo panorama en Primera
Tras lograr el ascenso, el Espanyol inicia una nueva etapa en la categoría reina del fútbol español con pocos seguros y muchas incógnitas. En primera instancia, la situación económica de la entidad no es buena, aunque ha mejorado respecto del curso anterior en cuanto al límite salarial, y la dirección deportiva tiene un arduo trabajo para confeccionar la plantilla para volver a LaLiga EA Sports y lograr la permanencia. Además, se le ha sumado una losa grande: la pérdida del máximo artillero, Martin Braithwaite, ya no forma parte de la plantilla, por lo que la entidad perica deberá buscar un sustituto acorde al nivel del danés.