El espanyolismo demostró una vez más su fidelidad al equipo con la mejor entrada de la temporada. Era uno de los muchos días que los pericos tienen marcados en su calendario hasta que acabe la temporada, y la afición respondió a la llamada del club. Aportó en la remontada ante el conjunto manchego. No podía ser de otra manera. Los 23.233 aficionados –unos 300 eran seguidores del Albacete Balompié– propiciaron un buen ambiente en las gradas del Stage Front Stadium y no pararon de animar al equipo, sobre todo, en los minutos finales cuando más lo necesitaban los jugadores de Manolo González.
La fidelidad de la hinchada del Espanyol está fuera de toda duda, lo ha demostrado en un sinfín de ocasiones, y lo volvió a hacer con motivo del partido ante el Albacete Balompié. Sabe que hay mucho en juego y no va a dejar solo al equipo en ningún momento. Tanto en los partidos en casa, como en los desplazamientos como ha demostrado en casi todas las salidas esta temporada. Y el viernes tampoco faltará a su cita en Butarque.
Hasta la fecha, este año nunca se había alcanzado la cifra de 23.000 espectadores. Solo en una ocasión, contra el SD Huesca en la que era la mejor entrada hasta la fecha, se superaron los 22.000, con una entrada de 22.472 en los que destacó un buen número de seguidores del conjunto oscense. Pero esta barrera de los 23.000 aficionados, posiblemente se superará en las próximas jornadas.
El Espanyol, que ha recuperado la segunda posición en la tabla, se jugará gran parte del ascenso ante su afición. Le quedan cuatro partidos y el Stage Front Stadium debe ser un fortín para ser un claro candidato al ascenso directo siempre que se logren también buenos resultados a domicilio. Andorra, Sporting de Gijón, Oviedo y Cartagena son los cuatro equipos que aún han de ir a Cornellà.