Las rachas están para romperlas y el Espanyol quiere poner fin esta noche a una negativa contra el Girona FC. El conjunto de Manolo González, cuarto en la clasificación, quiere seguir dejando buenas sensaciones y creciendo ante un rival que se le está atravesando desde que debutó en Primera en agosto de 2017. El Espanyol no consigue ganar al conjunto gerundense desde 2019, y ha sido incapaz de superarles en ninguno de los seis últimos duelos entre ambos equipos: cuatro derrotas y dos empates. Además, el conjunto perico solo ha sido capaz de ganar en tres de los 12 partidos en los que se han enfrentado de liga.
Los espanyolistas no han sido capaces de puntuar en sus últimas tres visitas a Montilivi y aún escuece la de la temporada pasada (4-1). Esa derrota fue un duro varapalo para el entrenador y cuestionó la viabilidad del proyecto. La dirección deportiva mantuvo su apuesta por González y finalmente el equipo salvó la categoría. Una temporada después, el Espanyol llega a Montivili cuarto y el anfitrión es el colista de la categoría.
Un Espanyol con confianza y ambición
El Espanyol, que vive instalado en la alegría, llega con moral después de lograr el gol del empate contra el Valencia CF en el 96′, en un encuentro en el que los blanquiazules tuvieron ocasiones de sobras para llevarse la victoria. Manolo González apuntó que había sido el mejor partido de la temporada y uno de los mejores desde que entrena al equipo. Así que viajan con confianza y hambre para seguir en la parte alta de la clasificación. Quiere reafirmar su buen inicio de campeonato.
En el vestuario del Espanyol quieren reencontrarse con la victoria tras dos jornadas sin ganar,. Saben que no será un encuentro fácil, pese a que el Girona, que viene de firmar un meritorio empate contra el Athletic en San Mamés (1-1), sea el colista. Nadie se relaja. Manolo González, que apuntó en la rueda de prensa que podría introducir alguna novedad, recupera a Pere Milla tras cumplir dos partidos de sanción.
Un Girona FC con urgencias
El Girona FC, por su parte, intentará dar continuidad a la notable imagen del martes en San Mamés (1-1), con una ilusionante actuación del centrocampista marroquí Azzedine Ounahi. El paso adelante de Bilbao da motivos para la esperanza tras un arranque de curso más que inquietante. El cuadro rojiblanco necesita sobre todo resultados para salir de una situación delicada. Entre la segunda vuelta de la temporada pasada y el principio de la presente suma 15 puntos de 75 posibles. El equipo gerundense comenzó a caer en enero y aún no se ha levantado.
En cuanto al estado de las plantillas, Míchel, que ve a sus jugadores más contentos, recupera tras sanción a Vitor Reis y Axel Witsel y tiene tres dudas en su once: el lateral derecho (Hugo Rincón o Arnau Martínez), el eje de la defensa, con tres jugadores (Daley Blind, Alejandro Francés y Reis) para dos posiciones, y el extremo derecho (Portu o Yáser Asprilla). Donny van de Beek sufrió una lesión en el tendón de Aquiles en San Mamés y se suma a las bajas de Thomas Lemar, David López, Juan Carlos Martín, Abel Ruiz y Viktor Tsygankov, también por lesión, y de Vladyslav Krapyvtsov y Joel Roca por el Mundial sub20.
Alineaciones posibles:
Girona FC : Gazzaniga; Hugo Rincón, Alejandro Francés, Blind, Àlex Moreno; Witsel; Portu, Iván Martín, Ounahi, Bryan Gil; y Vanat.
Espanyol: Dmitrovic; El Hilali, Calero, Cabrera, Romero; Edu Expósito, Urko, Pol Lozano; Dolan, Puado y Roberto Fernández,
Árbitro: Francisco Hernández (comité extremeño).
Estadio: Estadi de Montilivi (hoy, 21.00h)