Leandro Cabrera, Fernando Calero, Adrià Pedrosa, Sergi Darder y Nico Melamed son los jugadores de la actual plantilla del RCD Espanyol que han vuelto a vivir el amargo momento del descenso con la camiseta perica. Fue en la temporada 2019-2020 cuando se perdió la categoría como colista con 25 puntos y solo se consiguieron cinco victorias en 38 jornadas.
Todos ellos ayudaron a devolver a la entidad blanquiazul a la máxima categoría un año después de perderla. Los espanyolistas finalizaron la temporada 2020-2021 como líderes de LaLiga SmartBank con 24 victorias en 42 partidos, empatados a 82 puntos con el segundo, el RCD Mallorca. Aunque, la primera plaza fue para el Espanyol ya que ganó el golaveraje particular.
Javi Puado sabe lo que es descender con el Espanyol, aunque ese año no jugó ningún minuto. La temporada del anterior descenso, el canterano inició el curso con los pericos. Tras la falta de minutos con David Gallego y Pablo Machín, decidió salir cedido en el mercado invernal. Su destino fue el Real Zaragoza en Segunda división. Una vez acabada la temporada, Puado regresó a las filas espanyolistas y tras su gran año en Zaragoza (4 goles y 5 asistencias en 21 partidos) tuvo la confianza del club y Vicente Moreno para ser uno de los futbolistas que devolviese a los pericos a la máxima categoría.
Leandro Cabrera
El central uruguayo, Leandro Cabrera, fue una pieza importante para el ascenso espanyolista. Aterrizó en Barcelona en el mercado de invierno de la temporada 2019-2020 procedente del Getafe ganándose la titularidad del Abelardo y de Rufete. Fue titular en 17 de los 18 partidos que disputó (1.530 minutos). Su continuidad tras el descenso fue clave para el regreso a Primera. Jugó 3.250 minutos en 38 partidos siendo uno de los intocables para Vicente Moreno.
Fernando Calero
El defensa, Fernando Calero, fue otro de los futbolistas que continúo en el RCD Espanyol para devolverlo a Primera. Con una temporada irregular, el vallisoletano jugó 1.043 minutos en 15 partidos y vio una tarjeta roja el año del descenso. Ya la temporada del regreso a primera su protagonismo aumentó notablemente con Vicente Moreno. Calero jugó 28 partidos repartidos en 2.111 minutos. Además, de cara a portería colaboró con los pericos anotando un gol y dando una asistencia.
Adrià Pedrosa
El canterano del RCD Espanyol, Adrià Pedrosa, fue uno de los pericos que vio como aumentaba su participación en Segunda. En la élite el lateral alternó la titularidad con Dídac Vilà, ya que jugó 1.086 minutos y solo anotó un gol en 20 partidos. A las órdenes de Vicente Moreno su papel mejoró en la categoría de plata: 32 partidos, 1 gol y 1 asistencia. Todo ello en un total de 2.670 minutos.
Sergi Darder
Sergi Darder, uno de los pesos pesados del vestuario perico, se mantuvo como uno de los jugadores importantes del RCD Espanyol. En sus 36 partidos en Primera jugó 2.659 minutos, marcó 2 goles y repartió 1 asistencia. Todo ello en un año muy duro para la entidad espanyolista. Mientras, en Segunda división fue una de las piezas clave del ascenso. En los 40 partidos que disputó anotó 6 goles, dio 3 asistencias y jugó 3.041 minutos.
Nico Melamed
Nico Melamed fue el jugador que vivió el lado más duro del descenso. Tras su debut en la élite con el club de su vida, participó en seis de las últimas ocho jornadas cuando el equipo se hundió, pasó a ser miembro de la primera plantilla en Segunda división. El canterano debutó en la élite el 25 de junio de 2020 en el Benito Villamarín con una derrota por 1-0 ante el Betis en la jornada 31. Abelardo y Rufete contaron con Melamed para obrar el milagro. Sin embargo, el año en la categoría de plata se convirtió en un jugador importante para Vicente Moreno. En 33 partidos marcó 6 goles, dio 4 asistencias en 1.432 minutos.
Pol Lozano
El canterano, Pol Lozano, la temporada del último descenso jugó todas las competiciones con el Espanyol (LaLiga, Europa League y Copa del Rey), teniendo minutos en 14 encuentros, a la vez jugaba con el filial (11 partidos). La temporada en Segunda, el centrocampista pasó a tener contrato profesional, pero no tuvo mucho protagonismo en el regreso a Primera. Jugó 24 partidos, aunque solo fue titular en uno, y disputó 354 minutos.