Urko González de Zárate ha pasado de casi no jugar con la Real Sociedad ha hacerse fijo en en los onces del Espanyol. El pivote ‘txuri-urdin’ está volviendo a disfrutar y a coger minutos con el objetivo de alcanzar su mejor versión en Primera división. Estas buenas sensaciones a nivel individual también se trasladan a nivel colectivo porque con el vitoriano en el campo, los blanquiazules no saben lo que es perder -han sumado nueve puntos de los 15 posibles-.
Desde su llegada al Espanyol el pasado 23 de enero, como último fichaje invernal, a Urko González de Zárate le han pasado cosas buenas con la blanquiazul. Debutó en el Ramón Sánchez-Pizjuán con pocos entrenamientos con el grupo y en su segundo partido como perico ya se hizo con la titularidad ante el Real Madrid dejando muy buenas actuaciones en ambos encuentros. Este buen rendimiento se ha visto reflejado en los resultados y es que cuando el ’19’ perico ha jugado, el Espanyol ha conseguido dos victorias con portería a cero (Real Madrid y Deportivo Alavés) y tres empates (Sevilla FC, Athletic Club de Bilbao y Girona FC) mejorando sus números en la élite.
El pivote de 23 años, que solo se ha perdido un partido, ante la Real Sociedad por la cláusula del miedo, no se considera un talismán para el Espanyol. Sin embargo, tanto Manolo González como la plantilla si le ven como un jugador importante. Además, en 2025, el preparador blanquiazul parece haber encontrado su once tipo con un centro del campo formado por Pol Lozano, Alex Král y Urko González de Zárate. El ’19’ se encuentra muy cómodo, sin embargo, con la baja del canterano para Son Moix, el ‘txuri-urdin’ tendrá que asumir una responsabilidad mayor para distribuir el juego de los pericos.