Leandro Cabrera, uno de los centrales titulares de Luis García, ha sido de los pocos jugadores del RCD Espanyol que ha tenido un verano tranquilo. Después del descenso el nombre del uruguayo estaba en la rampa de salida, pero ha desvelado su continuidad en el club blanquiazul: «El club me transmitió que quería que me quedara y por mi parte si llegaba algo bueno para las dos partes se hablaría, pero no ha llegado nada».
«Fue un verano movido para el club en general». Leandro Cabrera ha explicado cómo estaba el Espanyol desde el descenso. No fueron meses fáciles porque «cuando se pierde la categoría todas las plantillas se tambalean un poco por cuestión de presupuesto y por jugadores. Eso lo hemos vivido de la mano de la dirección deportiva», ha reconocido. Incluso, la intención del vestuario ha sido «mantener la estabilidad, algo que no ha sido fácil porque ya empezaba LaLiga, pero supimos resolver de la mejor manera una situación difícil».
El reto del Espanyol no es otro que el del ascenso y para el uruguayo «para nada somos favoritos y cuando avance LaLiga ya se verá si lo somos o no». Además, ha añadido que «tenemos una confianza muy grande con lo que nos plantea el entrenador y en las características tanto individuales como colectivas». El juego de Luis García «nos beneficia» lo que ha llevado a que «tengamos los puntos que tenemos por capacidad y sobre todo por compromiso. No han sido partidos fáciles y la dinámica será eso».
Esta temporada, Leandro Cabrera es uno de los capitanes. Ya lució el brazalete en Albacete y su retorno a la capitanía lo considera como «un compromiso muy grande y no lo veo como algo influyente en la actitud de uno. Entiendo que es llevarlo, pero no cambia mi manera de ser, ni la manera de respetar al club».
Uno de los nombres propios ha sido el de su excompañero en el centro de la zaga César Montes. El defensa ha alabado a su compañero y ha reconocido que «su salida debilita la plantilla porque ahora solo somos tres centrales naturales. En seis meses demostró un nivel increíble y también por su rendimiento personal y en lo colectivo, por eso se ha ganado que un equipo haya apostado por el y pagarán ese dinero. Como compañero me alegro, pero el club y la plantilla salimos menos beneficiados». También ha destacado la incorporación de Ramón Ramos como un buen fichaje: «Desde su llegada se ha adaptado muy rápido y complementa a la plantilla porque el año pasado ya cojeamos en el lateral».
Lo que no ha pasado desapercibido son los pitos que recibió en el partido ante el Amorebieta. Leandro Cabrera está triste por ese momento y ha explicado que «no es del agrado de nadie y me sorprendieron» a la vez que ha reconocido que «no busco una ovación fácil ni vender humo. Respeto mucho a la afición y lo haré hasta el día que me vaya porque no va a cambiar mi concepto sobre los pericos».
Además, Luis García, desde su llegada, ha hecho evolucionar al central: «Nos da muchas armas en nuestro día a día para que estas cosas se den porque nos pide que arriesguemos y asumamos». El técnico ha sido clave tras el descenso. Sin embargo, el equipo ha hecho reset «porque te toca el orgullo y la fibra como profesional» y en el caso de Cabrera ha desvelado que “en mi caso me duró poco la reflexión. Se lo que es jugar con el Espanyol y el club merece un esfuerzo por parte de todo el mundo. El verano es más convulso porque no sabes que pasará y cuando vuelves a la ciudad deportiva se te pasan las tonterías”.
