Tuvo que responder preguntas incómodas, como casi en todas sus puestas en escena ante la prensa, el CEO del Espanyol, Mao Ye. No quiso siquiera valorar el comunicado del Real Madrid en el que pone el grito en el cielo contra os árbitros por la derrota ante el Espanyol asegurando que «a mi solo me preocupa el Espanyol«, pero sí que denunció «las amenazas que está recibiendo nuestro jugador», en alusión a Carlos Romero. Ante ellas, el club «le dará toda la defensa».
Mao Ye fue altamente criticado en la previa del duelo de Girona por decir que el club estaba en el mejor momento económico de su historia. Se ha defendido y ha explicado sus palabras, sin demasiada convicción. «Una cosa es estar bien financieramente, otra ser multimillonario. A día de hoy solo hay un préstamo pendiente con Rastar, ninguna deuda financiera con ninguna entidad. Estadio sin cargas, ciudad deportiva pagada… No hay millones para fichar porque venimos de un proceso de poner orden financiero, no queremos hipotecar el futuro. Trabajamos con los márgenes actuales para construir un futuro mejor».
«Después de dos descensos es entendible que la gente esté molesta y disconforme con la gestión»
Las constantes críticas de la afición
Y para ello, esta campaña está prevista una ampliación de capital anunciada en la última Junta de Accionistas, pero que todavía no tiene fecha. «Está prevista esta temporada, pero necesito más detalles para convocarla. No ha cambiado nada» desde que se anunció.
A pesar de las limitaciones económicas, el Espanyol ha podido hacer tres incorporaciones en este mercado invernal, teniendo algo de margen en el ‘fair-play financiero. Mao Ye lo explicó asegurando que es algo que viene del famoso CVC. «Hemos ido al límite tanto en verano como ahora. Todo lo que hacemos lo queremos hacer con un orden», dijo, desvelando que «ha habido una parte generada a través de gastos e inversiones realizadas por el CVC que LaLiga considera que se puede compensar parcialmente. Se ha hecho un trabajo previo con LaLiga, y hemos podido sacar cierto margen para inscribir a Pablo Ramón e incorporar a Roberto Fernández«.
Por último, ha restado importancia, como en su última comparecencia, a los cánticos y pancartas en contra de Chen Yansheng y la directiva. «Es una forma de expresarse de un grupo de aficionados. En ocasiones anteriores ya hemos dicho que después de dos descensos es entendible que la gente esté molesta y disconforme con la gestión».