Cuando Raúl Tamudo enfiló camino a Escocia para fichar por el Glasgow Rangers, el doctor de dicho equipo, apellidado Gert, le encontró problemas en su rodilla y el ’23’ volvió al Espanyol; se frustó su fichaje. De ahí nació la Peña Doctor Gert Diga 23, la cual ahora habla de otro mito: Ricardo Zamora. Ante los constantes problemas de encontrar un ‘maning right’ al estadio, apuesta por llamarlo como ‘El Divino‘. Este es el comunicado íntegro:
‘Entramos en la temporada de nuestro regreso a Primera División —esperemos que el definitivo—
con una aparente mala noticia. El club ha roto el contrato que le unía a la compañía estadounidense Stage Front como naming partner del Estadio de Cornellà El Prat, a razón de un millón de euros
por cinco temporadas, tras los impagos de la empresa que casi nadie alcanza a adivinar a qué se
dedica. Llueve sobre mojado, tras el timo de Power8 en 2015. Pierde, de nuevo, ingresos, pero gana
una oportunidad de oro para darle un valor a uno de sus grandes activos: el estadio.
En el mundo del fútbol, y especialmente en el Espanyol, se ha generalizado un ambiente de gestión
cortoplacista, clientelar y desarraigada que poco tiene que ver con el espíritu de nuestra irreductible hinchada. La estrategia de la directiva, centrada en mantener un nombre completamente neutro
y despersonalizado de nuestro campo (RCDE Stadium) para no espantar a posibles patrocinadores
que quieran darle su nombre se ha dado nuevamente de bruces contra los imprevistos: el club se
queda sin dar a su estadio una identidad propia y reconocible y sin un contrato fallido.
Y qué contrato, por cierto. ¿Acaso el nombre de nuestra casa vale un millón de euros por temporada? ¿Esas minucias son la moneda de cambio que la directiva y el área de marketing aceptan por
perder la fuerza identitaria de un Santiago Bernabéu, un Anfield, un San Siro, un Sarrià o un Mestalla? Nada más lejos de la realidad, ensuciar de esta manera uno de nuestros mayores elementos
identitarios es un gravísimo menoscabo a la imagen y percepción del Espanyol, tanto propia como
ajena. Un club de fútbol necesita de la mística popular que lo haga reconocible y diferente a sus
rivales y el Espanyol atesora la leyenda de Ricardo Zamora.
El regreso a la máxima categoría, que nos situará entre los mayores clubes del país por 88ª vez, es
una oportunidad para nuestra memoria histórica, que nos asocie, de una buena vez y para siempre,
con la primera gran figura del fútbol en España, cuyo espíritu es perico, Ricardo Zamora. A falta de
la corrección de sus señorías expertos de marketing, se nos ocurre que igual otorga una potencia y
valor de marca mayor que venderse a la primera sociedad de cualquier sitio del mundo que ponga
su nombre al estadio a cambio de pagar la fi cha de una medianía de la plantilla.
Por ello, solicitamos desde la Peña Doctor Gert Diga 23, la reparación de una deuda histórica con la
mayor leyenda de nuestro club: nada menos que el mejor portero de la historia del fútbol, quien da
nombre al premio de mejor guardameta de nuestra Liga, figura mediática pionera en España y símbolo universal de amor al RCD Espanyol. Solicitamos, en suma, el bautizo del RCDE Stadium como
ESTADIO RICARDO ZAMORA.
Barcelona, a 1 de julio de 2024. Peña Doctor Gert Diga 23.’
1 comentario
Y a quién representa esta peña?? Cuantos socios tiene?? No será una peña familiar como alguna hay.