Salvi Sánchez entró ante el SD Eibar en lugar de Pere Milla en el minuto 77 y se le vio con ganas. En los pocos minutos que tuvo dejó un gran caño a Arbilla, en una buena acción individual, y un disparo a puerta. El de Sanlúcar de Barrameda, que ya dio un paso al frente en Copa, reconoció que prefiere que las malas rachas lleguen ahora que con el campeonato más adelantado. “Prefiero sufrir esto en la jornada 14, y que a la gente le duela y apriete, que en la 40. Son momentos para estar juntos, tranquilos, aunque es difícil”, manifestó. Y reconoció que al acabar el partido contra la SD Eibar estaba “caliente, con la cabeza a 180 revoluciones, pero está categoría es muy larga”.
Con el primer tercio del campeonato cumplido, aún queda mucho por delante, por lo que Salvi considera que “hay que estar tranquilos y vamos a trabajar para conseguir el objetivo al final de curso. Estoy convencido que lo vamos a hacer, aunque muchos ahora sea difícil de verlo”.
Salvi Sánchez insistió en unas palabras que manifestó al ser presentado como nuevo jugador del Espanyol. “Ya lo dije el día que vine y lo digo ahora también, los momentos difíciles son los que hacen los grandes vestuarios y grandes aficiones”. Por lo que respecta al partido, reconoció que “se nos puso cuesta arriba al principio porque se pusieron por delante; sabían a lo que tenían que jugar, a dónde venían. Hicimos la más difícil, que es darle la vuelta al marcador, pero en la última jornada por infortunio o acierto de ellos nos empataron”.
Pese a la ilusión que hay en una parte de la afición, confía en que al final todo tendrá un final feliz. “Estoy seguro que les vamos a dar muchas alegrías. Sabemos de la afición que tenemos. Van a todos los desplazamientos. No se pierden uno. Son una gran afición y ahora es el momento de estar todos juntos”, concluyó Salvi Sánchez.